Toda etapa, en algún momento de la vida, concluye. Como es la de este muchacho, que finalmente decide vender su consola de juegos y así dejar atrás su período pueril e incursionar en el maravilloso mundo del sexo, cambiando los servicios su castigada mano derecha, por una opulenta señorita que lo espera ansiosa a la vera de la cama.
PARA VER A LA OTRA DIOSA, CLICK AQUÍ: https://twitter.com/nosubaseso/status/931508496910241792
No hay comentarios:
Publicar un comentario