¿Qué
pasó con ese tesoro tan preciado que se guardaba para el afortunado que
consumara el santo matrimonio? Era la excusa perfecta de todas las
señoritas, que esperaban ansiosas la máxima proposición de los galanes
de turno, ávidos de explorar caminos sinuosos e intransitados (ponele).
Era elemental pasar por el anillo de oro antes que por el de cuero.
Y ahora, en contraste con todo lo relatado, vemos lo fácil que se la
hacen a Edgar, que el hecho se consuma en sólo dos semanas. Además vemos
a la señorita feliz, contándole a todo el mundo lo dichosa que se
siente al haberle quedado la cola haciendo "Tururú".
#nosubasesoHDP #ArdePapi #SalioConBonete
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